72. ARPEGIOS DE GRAN RECORRIDO

Abordamos en este capítulo un elemento muy pianístico y que puede entrañar cierta dificultad. Con arpegios de gran recorrido nos referimos a aquellos que precisarán de algún cruce. Cualquier cruce en un arpegio supera el compromiso de aquellos que nos podemos encontrar en las escalas, no obstante el proceder será muy similar. Por eso es necesario antes de emprender el trabajo con estas partituras haber asimilado muy bien las propuestas de los capítulos donde trabajamos los distintos tipos de cruce de las escalas.

Esta primera partitura presenta dos piezas breves, la primera dedicada a la mano derecha y la segunda a la izquierda. Cada una de ellas integra tres tipos de cruce que varían según la distancia o la digitación. En cuanto al elemento que trabajamos las dos manos hacen el mismo trabajo, … Ampliar »

Tenemos una única pieza, dedicada a la mano derecha. A diferencia de la propuesta anterior, los cruces se dan siempre entre dos teclas blancas. El estudio tendrá su recompensa, pues además de ejercitaros en este tema disfrutaréis de una sonoridad muy atractiva.

Siguiendo el planteamiento de la patitura anterior, dedicamos ahora una pieza completa a la mano izquierda.

En este caso la mano derecha se sitúa en un contexto tonal que le exigirá realizar cruces, en el recorrido descendente de un arpegio, entre tecla blanca y tecla negra a distancia larga. Será pues, para la mano derecha, el trabajo más comprometido de la colección de este capítulo.

Con el mismo planteamiento de la partitura anterior, le dedicamos esta pieza a la mano izquierda. La correcta ejecución de los arpegios, con una intensidad que respete a la mano derecha melódica, junto con un uso adecuado del pedal otorgarán a esta pieza una sonoridad fantástica.